Algo bastante común en la cotidianidad venezolana, es esa pequeña minoría de adolescentes que, tienen sus ídolos musicales bien establecidos, lo que los hace minoría no es eso, sino el hecho que, viven, duermen, tiran, hablan (o intentan), actúan, se comportan como si fueran asiáticos. Pero el problema no reside ahí, el peo reside en que, por más que quieran, de la noche a la mañana no se les aclarará la piel a un tono amarillezco, tendrán cabello lacio, un teléfono de marca extraña, y un vehículo "verde", igualmente de marca extraña con un ambientador de Pikachu/Hello Kitty.
Nosotros, la cultura occidental, solemos diferenciar los baños con cartelitos azules, para los baños de hombres, y un cartelito rojo o fucsia (en pocos casos) para las mujeres. Ambas identidades sexuales están bien definidas con esos coloretes.
Por otro lado, cruzando la batea, en la cultura asiática (Los orientales), tienen también sus colores pero en el caso de los baños, hay 3 carteles. Uno amarillo, uno rojo, y uno azul. Y ustedes se preguntarán...
¿Amarillo, rojo, azul? ¿Son venezolanos encubiertos? ¿Hay transexuales con baño propio? ¿Hay un baño para maricos? ¿Un baño para el apuro?
No.
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Hombres Mujeres Pokémons |
Simplemente es así, aunque, en algunos caso se reemplaza la silueta de Pikachu por una silueta andrógena o se coloca el iconito de Android. Debo resaltar que cuando hablo de Oriente y Occidente, no me refiero a Zulia, Táchira, Apure, Mérida, Falcón ni Bolívar, Anzoategui, Sucre, Nueva Esparta o cualquier ciudad destino a los que llegan los autobuses de Expresos de Los Llanos/Oriente/Occidente.
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